A tan solo 10 minutos del centro de Cúcuta, Norte de Santander, y sobre el río Táchira, se construye desde hace 16 meses el tercer puente internacional en esta región colombiana, que buscará no solo mejorar la movilidad entre Colombia y Venezuela sino también aumentar el intercambio comercial.
El Colombiano
La obra, en la que trabajan obreros de ambos países —con diseños colombianos—, es un uno de los proyectos de obra pública más importantes que se adelantan en el país, y en el que trabajan varias docenas de hombres que sortean las altas temperaturas y lo agreste de un terreno que hasta hace unos meses era completamente baldío.
El puente Las Tienditas estará ubicado entre Ureña y Cúcuta y comunicará el sector de Villa Silvania en Colombia con Las Tienditas en Venezuela. “Esta obra conectará dos naciones hermanas. La construcción de este puente internacional se dio como alternativa ante la saturación vehicular que hoy presentan los puentes Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander”, dijo la ministra de Transporte, Natalia Abello.
Entretanto, el alcalde de Cúcuta, Donamaris Ramírez, ha señalado que aunque efectivamente este será el puente más importante que se está construyendo en la frontera, hay que pensar en un plan estratégico para controlar el contrabando cuando el puente esté listo, en septiembre de este año.
“Este será el puente más importante de Colombia en cualquier frontera del país. Es un puente que veníamos luchando desde el comienzo de esta administración, de hecho los cucuteños desde 1970 venían hablando del puente de Las Tienditas. La gran ventaja de esta estructura es que va a tener tres carriles de entrada a Colombia y tres carriles de ingreso a Venezuela”, dijo.
Agregó que saben que su construcción va a impactar positivamente a Cúcuta, “ya no tenemos que estar pensando en los angostos puentes que tenemos. Estamos convencidos de que va a impactar el comercio entre los dos países. Hemos dicho que frente al impacto de este puente se debe formular un plan parcial para proteger los terrenos que están a los lados del puente y no se conviertan en otro sector como La Parada en Villa del Rosario. Tendrá que darse un desarrollo de vivienda, de comercio legal”.
La canciller María Angela Holguín destacó que este será el puente más importante que va a tener Colombia en cualquiera de sus fronteras y es la demostración de que “podemos trabajar juntos en un consorcio colombo-venezolano que ha funcionado muy bien”.
El vicepresidente Germán Vargas Lleras señaló que este proyecto es la muestra de que “estamos ejecutando las obras de acuerdo con los cronogramas que hemos establecido y así demostramos que cumplimos con todos los compromisos que hemos adquirido. Este será el principal punto de conexión binacional del país y estamos impulsando el desarrollo vial que fortalece el comercio nacional e internacional”.
El proyecto
De acuerdo con el Invías, el proyecto contempla la construcción de tres puentes paralelos, dos de los cuales servirán para el tráfico vehicular y el tercero será una pasarela para uso de peatones y bicicletas.
Cada una de las estructuras está conformada por un puente de dovelas sucesivas (sistema de construcción) de 280 metros de longitud con luz central de 140 metros y voladizos compensados de 70 metros cada uno.
Para adelantar la construcción de la obra el gobierno de Venezuela, a través de la empresa Vialidad y Construcciones Sucre (Vicsucre) adjudicó el contrato a las firmas Conconcreto de Colombia y Pilperca de Venezuela, quienes serán son las encargadas de la obra binacional.
Por último, informó el Invías que por tratarse de un puente binacional se hizo indispensable que los diseños cumplieran a cabalidad la normativa de Colombia y Venezuela y debido a esto, se adelantaron atendiendo en su integridad los requerimientos del Código Colombiano de Diseño Sísmico de Puentes.
