Diario La República
Deberán implementar un sistema especial y reportar operaciones sospechosas a la UIAF. Hasta ahora, solo los bancos estaban obligados a tener sistemas para detectar el ingreso de capitales ilegales a sus cuentas, pero ahora tendrán que hacerlo también las grandes empresas del llamado sector real.
La Superintendencia de Sociedades acaba de expedir la circular 05 en la que ordena el montaje de estos mecanismos para las firmas vigiladas por ella y que sobrepasen en los 160.000 salarios mínimos en ingresos brutos, que hoy equivalen a unos 98.000 millones de pesos.
Las que hayan superado ese tope en el 2013 deberán cumplir la norma máximo a 31 de diciembre de este año, y las que lo hagan de acá en adelante, a los doce meses de que hagan su reporte de ingresos.
De acuerdo con el superintendente de Sociedades, Luis Guillermo Vélez, hace dos años se empezó a analizar cómo evitar que dinero de narcotráfico, corrupción, contrabando, minería ilegal y otras actividades proscritas, se cuelen en la economía, y se optó por un mecanismo de autocontrol que, sin embargo, fuera obligatorio.
“La obligación es montar el sistema de autogestión como mejor considere (la empresa) que debe hacerlo, teniendo en cuenta su actividad, el tamaño y la forma de vender sus productos, porque no es lo mismo una gran superficie que tiene manejo de efectivo que una empresa que hace turbinas para hidroeléctricas y vende cuatro al año”, explicó Vélez.
En todo caso, debe poder identificar situaciones que generen riesgo de lavado de activos y establecer procedimientos de debida diligencia de clientes, proveedores, socios y trabajadores.
Una obligación adicional es reglamentar el manejo de dinero en efectivo y acreditar los soportes de operaciones y contratos.
El otro requisito es incluir como buena práctica el reporte, voluntario, de las operaciones sospechosas a la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF).
Las empresas que no implementen estas medidas podrían ser sancionadas, según el superintendente Vélez, quien indicó que su entidad está en condiciones de hacer cumplir la norma, pues no son más de 1.000 empresas sobre las que recaen.
TENDENCIA INTERNACIONAL EN CONTROL
El Supersociedades, Luis Guillermo Vélez, explicó que el sistema de control de lavado de activos y financiación del terrorismo se empezó a montar dos décadas atrás. Se inició en la banca estableciendo mecanismos de control y verificación de operaciones sospechosas.
“Por ejemplo, si llegaba un señor con un maletín con 500 millones de pesos en efectivo, no es que no se los aceptaran, sino que se impuso un protocolo para verificar la procedencia del dinero, así como la identidad de la persona y los negocios que tenía”.
Para algunos casos, se hizo obligatorio el reporte a la UIAF (Unidad de Información y Análisis Financiero).
Luego, hace cuatro años el Grupo de Acción Financiera Internacional sobre el Blanqueo de Capitales (GAFI), organismo que unea 29 países, recomendó extender los controles al llamado sector real, como ahora se hace en Colombia.