EDITORIAL:
La relación binacional ha atravesado por diversos momentos, al finalizar el 2010 y realizar el balance de la misma, podemos concluir que su tránsito por diversas tensiones, el congelamiento, el rompimiento, el restablecimiento y su actual reimpulso, han ayudado a la conformación de un empresariado ingenioso y decidido a apostar por un esquema de relacionamiento sustentable y equilibrado, siempre dispuestos ha seguir trabajando y generando el empleo y riqueza, necesarios para el óptimo desarrollo de ambas naciones.
De esta manera, los últimos avances de la agenda bilateral instituyen como bases del relacionamiento la buena vecindad y la hermandad, estableciendo como primer paso la conformación del Comité Binacional Económico Productivo, punto de partida para la reactivación de acuerdos previos como el energético, el pago progresivo de la deuda y el fortalecimiento de la seguridad fronteriza, dentro de un plan tan ambicioso, donde el pronto levantamiento de las restricciones administrativas por parte de Venezuela se constituye en uno de los aspectos críticos en el avance y fortalecimiento de la relación.
En este sentido, diversos sectores que conformamos la relación entre ambos países nos encontramos optimistas y al mismo tiempo expectantes con respecto al futuro mantenimiento de las relaciones entre ambos gobiernos, que si bien, poseen concepciones político – económicas diferentes, han decidido dejar de lado esos desacuerdos en pro de la buena vecindad y la conservación de los beneficios que este vínculo histórico geográfico representa.
Es en este contexto el rompimiento de paradigmas se encuentra a la orden del día, dentro de un esperado relanzamiento de las relaciones, los planes para su consolidación abordan temas como la infraestructura, el comercio, lo cultural y lo social, el enfoque fronterizo tan esperado por CAVECOL se ha anunciado como parte integral del plan, esperamos que su desarrollo y ejecución trascienda a la generación de capacidades y al notable mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de ambos países, dentro de los cuales, los ciudadanos que habitan la zona fronteriza requieren una mayor asistencia.
Es por esta razón que en la presente Edición Aniversario les presentamos una publicación especial, donde lo binacional cobra mayor vigencia. Les invitamos a recorrer y disfrutar de la Revista CAVECOL Nº 8, donde la integración entre ambas culturas es testimonio fiel de la interdependencia que se ha consolidado a través de la historia, y donde nuestra organización sigue y seguirá jugando el rol que siempre le ha correspondido, el de un canal institucional de comunicación y relacionamiento entre actores de lo diversos ámbitos de la escena venezolano colombiana.
Despedimos el 2010 con muchas lecciones aprendidas, una relación restituida y una institución fortalecida, dispuesta a aportar su grano de arena a la consolidación de la confianza entre ambas naciones, conscientes de la misión sensibilizadora hacia nuestros afiliados en torno a lo social y a la generación de nuevos esquemas y espacios de trabajo, manteniendo nuestra labor enfocada en la excelencia y el compromiso con la integración y con un futuro responsable.
Feliz Navidad y Próspero 2011.
Daniel J. Montealegre R.
Presidente de la Junta Directiva
2009 – 2011