Colprensa | Diario La República
La reducción del contrabando y el aumento en el recaudo de impuestos son cuestiones de especial interés para el crecimiento de la economía de Norte de Santander y del país.
Santiago Rojas, que por segunda vez en su carrera está a cargo de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), estuvo en Cúcuta y habló con La Opinión sobre este y otros aspectos que exigen cada día más atención de la entidad.
¿Cómo estuvo el ingreso de contrabando desde Venezuela en 2014?
Entendiendo que hay nuevas políticas en Venezuela, que hay más controles de ambos lados de la frontera y que hay una escasez de productos en el vecino país, quizás por esto se ha notado una reducción en el ingreso de mercancía legal e ilegal procedente de esa nación.
El año pasado se decomisaron unos $14.000 millones en productos, que representó un aumento del 35% en relación a 2013.
Si hay una reducción, ¿por qué las calles de Cúcuta siguen llenas de productos perecederos venezolanos, que además son subsidiados en ese país?
Los que pasa es que con el diferencial cambiario tan alto que hay entre el peso y el bolívar fuerte, sin importar la escasez que haya en Venezuela, las mafias siguen consiguiendo mercancía para después ponerla en el mercado nacional.
El año pasado la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) desmanteló cinco bandas de contrabando, entre ellas una de medicamentos y otra de perecederos.
¿Cuánto le cuesta el ingreso de contrabando a la economía nacional?
Es muy difícil medir eso pues no hay una estadística real sobre cuánta mercancía ilegal ingresa al país.
Lo que sí sabemos es que el contrabando no solo produce un daño fiscal, sino que genera un enorme riesgo para la salud de los ciudadanos colombianos, sobre todo en el tema del tráfico de alimentos, medicamentos y animales vivos.
¿Qué pasó con el contrabando de ganado tras el desmantelamiento de la red que se ocupaba de esto en la frontera?
El tema del ganado nos preocupa mucho, porque se está arriesgando la calidad de la industria ganadera del país. En este negocio hay bandas destinadas al lavado de dinero, a las que lo único que les interesa es monetizar los dólares que ganan con el narcotráfico.
Sin adelantar investigaciones en curso, sí puedo decir que a nivel de inteligencia se está trabajando muy fuerte y hay investigaciones que esperamos se puedan presentar a la opinión pública en las próximas semanas.
Pero sigue pasando ganado por la frontera…
El año pasado se aprehendieron alrededor de 22.000 animales vivos, que es una cifra muy grande. Los costos de atención y procesamiento de estos animales superaron los $1.000 millones.
¿Cuál es la mejor forma de combatir el traspaso ilegal de mercancía?
Una de mis tesis en el tema del contrabando es que la frontera se tiene que entender como un régimen especial, en el sentido en que hay un comercio natural propio de estos lugares por el cual no se puede decir que se va a parar todo el comercio.
Es normal que las personas pasen de un lado a otro para comprar productos. Ahí lo que se tiene que lograr es que esto se haga bajo las normas existentes. La idea es mirar cómo venden estos productos venezolanos pero de manera legal.
Contrabando, informalidad y desempleo, ¿cómo afectan estos factores el recaudo de impuestos en la región?
Este es el punto crítico. El Estado está tomando unas acciones para que la informalidad se transforme en formalidad y esa es una política pública que no se puede dejar de lado.
Siempre que vengo a Cúcuta noto que la informalidad se hace presente de manera muy alta y eso significa que el Estado recibe menos ingresos y que los empresarios legales están siendo víctimas de una competencia desleal, algo que no es justo.
Entonces, ¿qué se debe hacer para combatir la evasión?
Esto se hace a través de una política pública. No se trata de imponer sanciones a la fuerza, se trata de cómo formalizar a los informales, a los pequeños empresarios. Soy un convencido de que el informal está condenado a no crecer.
Se han detectado muchos frentes para trabajar. Por ejemplo, hay algunos ciudadanos que no cumplen sus obligaciones por falta de información, hay empresarios que no lo hacen porque les parece engorroso y otros piensan que si lo hacen van a quedar en el radar de la Dian de por vida y entonces les parece muy costoso.
Nuestra meta es bajar la evasión del 22% al 11,5% en los próximos cuatro años.
¿Cuál fue el comportamiento del recaudo en el país en 2014?
A nivel nacional, el recaudo bruto fue de $114 billones, $9 billones más que en 2013, cuando se recaudaron $105 billones. Si bien esas son cifras importantes, al final se sintió un poco la reducción por las rentas petroleras y aunque el pago de personas naturales aumentó, no se llegó a cumplir la meta.
En cuanto al objetivo de 2015, el Ministerio de Hacienda está haciendo el cierre del año pasado y el balance para establecer la meta de recaudo de este año.